LA FORMACIÓN PROFESIONAL EN LA LEY CELAÁ

La Confederación de STEs-Intersindical, de la que forma parte STEA-i, quiere mostrar su inquietud por las graves repercusiones que puede llegar a tener la nueva ley educativa (LOMLOE) en la Formación Profesional. Así se lo hemos transmitido tanto a la Secretaría General de Formación Profesional del Ministerio como al grupo parlamentario socialista. En efecto, la Confederación de STEs-i ha mantenido varios contactos tanto con representantes del Ministerio de Educación y Formación Profesional como con diferentes grupos parlamentarios para trasladarles su preocupación por el tratamiento que la nueva ley educativa va a dispensar al Profesorado Técnico de FP. Entre estos contactos hemos mantenido una reunión con la secretaria de estado de FP del Ministerio (Clara Sanz López) y con la portavoz parlamentaria de Educación del grupo socialista (Mª Luz Martínez Seijo), reunión en la que además de mostrar  nuestra inquietud, le exigimos que los cambios en la FP que proyecta la ley se hagan sin dejar atrás a ninguno de los actuales profesores y profesoras pertenecientes al cuerpo de Técnicos de Formación Profesional, con independencia de su titulación o de que tengan la condición o no de funcionarios de carrera.

                El proyecto de ley educativa, actualmente en el Senado, pretende integrar en el Cuerpo de Profesores de Enseñanza Secundaria a todos aquellos docentes que en la actualidad pertenecen al Cuerpo de Profesores Técnicos de FP y que tienen titulación universitaria. Aquellos y aquellas que no disponen de esa titulación, si tienen la condición de funcionarios de carrera, permanecerán en una situación transitoria hasta su jubilación (a extinguir). La Confederación de STEs-i discrepa con dos aspectos de esta medida:

1º.- La exigencia de titulación universitaria para impartir docencia en toda el área práctica de la FP nos genera dudas. Especialmente en determinadas familias profesionales, creemos que es un error de base el enfoque excesivamente teórico que puede suponer esta exigencia de titulación universitaria. Que la solución sea (pretensión del Ministerio) acudir a la contratación en régimen laboral de profesionales especialistas que suplan la falta de profesorado con conocimientos técnicos, es sólo un parche paliativo que, además,  generará problemas de gestión de personal a las consejerías de Educación, así como agravios comparativos entre colectivos docentes que trabajarán bajo condiciones distintas.

2º.- Colocar a una parte del actual colectivo de Profesorado Técnico de FP en la situación de “a extinguir”, y expulsar fuera del sistema a aquellos y aquellas que no reuniendo los requisitos de titulación se encuentren en la situación de interinidad, resulta intolerable. La Confederación de STEs-i siempre ha defendido con carácter general la creación de un Cuerpo único de Enseñantes y, muy en particular, la equiparación de las condiciones de trabajo y salariales de los dos cuerpos docentes que imparten clases en la FP. Ahora bien, lo que no vamos a consentir es que esta integración de cuerpos docentes se haga, como se perfila en la LOMLOE, dejando por el camino a una parte de los y las docentes del actual Cuerpo de Profesores Técnicos de FP. La integración de cuerpos docentes se tiene que hacer con todo el profesorado, sin excepciones.

                Para la Confederación de STEs-i no son suficientes las vagas promesas recibidas en las diferentes reuniones y contactos mantenidos hasta ahora. Esta organización sindical no se va a conformar con esperar, como pretende el Ministerio o el grupo socialista, a que el detalle de la integración del Profesorado Técnico en el Cuerpo de Secundaria se regule más adelante en el desarrollo reglamentario de la LOMLOE. Es por ello que emplazamos tanto al Ministerio de Educación como a quienes están tramitando el texto legislativo, a que se comprometan públicamente a que la deseable integración de cuerpos docentes se haga, en el caso de la Formación Profesional, de manera automática para todo el profesorado actual, sin excepción alguna y con independencia de titulaciones o de la condición funcionarial que tengan.